jueves, 31 de julio de 2008

María Antonieta


REFLEXION

Todo lo dan los dioses, los infinitos,

a sus favoritos, todo:

todas las alegrías, las infinitas,

todos los dolores, los infinitos, todos.

J.W.GOETHE

"ANDÁIS DESTRUYENDO EL MUNDO"




Cuando en Cajamarca se encontraron inkas y europeos, hubo una entrevista,
previa a la emboscada, entre Atahualpa y el cura Valverde, el cual finaliza
su discurso con este ultimátum: "Sábete que serás apremiado con guerra a
fuego y sangre, y todos tus ídolos serán derribados por tierra, y te
constreñiremos con la espada a que dejando tu falsa religión, recibas
nuestra fe católica y pagues tributo a nuestro Emperador, entregándole el
reyno. Así tú y todos tus indios seréis destruidos por nuestras armas".

Y el cronista Garcilaso continúa su narración así: "...Atahualpa habiendo
oído lo último de la oración, que era renunciar a su reino de grado o
fuerza, y quedar por tributario, y que lo mandaba así el Papa, y que el
Emperador lo quería, y las amenazas que le hicieron con fuego y sangre, y la
destrucción que había de venir, como la del Faraón y su ejército, se
entristeció, imaginando que aquellos a quien él y sus indios llamaban
Viracochas, creyendo que eran dioses se les convertían enemigos mortales,
pidiéndole cosas tan ásperas; y dio un gesto con esta voz ¡Átac!, que quiere
decir ¡Dolor! Y con esta interjección dio a entender la pena que había
sentido de haber oído el ultimátum de Valverde, y templando su pasión
respondió:
Alegría fuera para mí, que ya que me negáis todas las otras cosas que a
vuestros mensajeros pedí, a lo menos me concediérais sola una, y era que me
hablaran por intérprete (Felipillo) más fiel. Digo esto, porque no puedo
entender las palabras que has hablado y que este faraute me ha dicho, porque
a la lógica no corresponde; porque habiendo de tratar de paz, amistad y
hermandad perpetua, y aún de parentesco, como me dijeron los otros
mensajeros, suena ahora en contrario todo lo que este Felipillo me ha dicho,
que nos amenazas con guerra y muerte, con destierro y destrucción, y que por
fuerza o de grado he de renunciar a mi reino, y hacerme tributario de otro.
De lo cual colijo una de dos, o que vuestro príncipe y todos vosotros sois
tiranos que andáis destruyendo el mundo, quitando reinos ajenos, matando y
robando a los que no os han hecho injuria, o que sois ministros de
Pachacámac, que os ha elegido para castigo nuestro. Y si es así, mis
vasallos y yo nos ofrecemos a la muerte y a lo que de nosotros quisiéredes
hacer, no por temor que tengamos de vuestras armas y amenazas, sino por
cumplir lo que mi padre Huayna Cápac ordenó en su lecho de muerte, que
honrásemos una gente extraña que había de venir después de sus días, de la
cual tuvo noticia años antes que andaban por la costa del Imperio. Díjonos
que habían de ser gentes de mayor ley y mas sabios que nosotros. Por lo
cual, cumpliendo el testamento de mi padre, os hemos llamado Viracochas
entendiendo que sois mensajeros del Pachacámac cuya voluntad y justa
indignación, ni con armas se puede resistir, además hemos guerreado tanto
entre hermanos incas, y los pecados de ambos bandos claman castigos. Pero
también, en su indignación, el Pachacámak tiene decencia y comprensión. Por
tanto ¿cómo explicar que siendo vosotros mensajeros divinos, hayan sido
autores de tantas muertes, robos y crueldades en su trayecto desde Tumbes y
Puná? Además de esto, me ha dicho vuestro Faraute que me proponéis 5 varones
señalados que debo conocer.
El 1ro. es Dios "Tres y Uno", que son cuatro, a quien llamáis Criador del
Universo. ¿No es el mismo que nosotros llamamos Pa-chacámak?
El 2do. es el que decís "Adán, Padre de todos los otros hombres".
Al 3ro. llamáis "Jesucristo", que fue muerto por los pecados de todos.
Al 4to. nombráis "Papa".
El 5to. es Carlos y es príncipe y señor de "todo el mundo".
¿Y entonces, este Carlos qué permiso puede requerir del Papa que no es mayor
señor que él? También me admiro que digáis que estoy obligado a pagar
tributo a Carlos y no a los otros, pues no dáis razón para el tributo, ni yo
me hallo obligado a darlo. Porque si de derecho hubiese de dar tributo,
paréceme que se había de dar aquel Dios, 3 en 1, que dices que nos creó, y a
aquel Adán que fue padre de todos los hombres, y a aquel Jesucristo que
nunca amontonó pecados. Finalmente, se habrían de dar al Papa, ya que dicen
que puede dar y conceder mis reinos y mi persona a otros, sin que siquiera
esté yo enterado. Pero si Ud. Sacerdote (Valverde) me dice que a estos "no
les debo nada", pues menos debo a Carlos, que nunca fue señor de estas
regiones ni las ha visto. Si después de esto, tienen algún derecho sobre mí,
fuera razonable que me lo declares antes de hacerme amenazas con guerra,
fuego, sangre y muerte, para que yo obedeciera la voluntad del Papa, que no
soy tan falto de juicio que no obedezca a quien puede mandar con mas razón,
justicia y derecho que yo. Además deseo saber de aquel curaca Jesucristo que
nunca echó pecados. ¿Murió de enfermedad o en la guerra? También deseo saber
si tenéis por dioses a esos 5 que me habéis propuesto, pues los honráis
tanto; pues si es así tenéis más dioses que nosotros, que no adoramos más
que al Pachacámac por supremo, al Sol por su inferior y a la luna por
hermana..." (Garcilazo de la Vega - Cap. XXIV, Libro 1ro. de la 2da. Parte
de los Comentarios Reales de los Inkas-1587)

-"¡SANTIAGO, A ELLOS!", fue la réplica del feroz cura Valverde "Cipriani",
dando así la Orden de Ataque contra el Tahuantinsuyo, en esa, la emboscada
de Cajamarca del 16 NOV 1532

Quevedo


Érase un hombre a una nariz pegado,
Érase una nariz superlativa,
Érase una alquitara medio viva,
Érase un peje espada mal barbado;

Era un reloj de sol mal encarado.
Érase un elefante boca arriba,
Érase una nariz sayón y escriba,
Un Ovidio Nasón mal narigado.

Érase el espolón de una galera,
Érase una pirámide de Egito,
Los doce tribus de narices era;

Érase un naricísimo infinito,
Frisón archinariz, caratulera,
Sabañón garrafal morado y frito

Destrucción absoluta


esta piedra lunar que me has robado
este cuento de Lovecraft
esta novela de P.K. Dick
este amor que te tuve
que te tengo

esta marca de posesión que has dejado en mi piel
como un horrible tatuaje

Tantas horas
de amor desperdiciado
despreciado
descomunal

destruyes todo lo que tocas
tanto dolor produces
deberías sentir piedad por tus víctimas
o tal vez misericordia

pero para eso hay que tener un corazón no de carne

Kali -Ma



Himno a Kali (fragmentos)

Madre de afilados colmillos
que sostientes el sable y la cabeza cortada.
Diosa cuyas manos
apartan todo temor
y complacen en todos sus deseos
a tus adoradores.

Ellos se transforman en Deseo
el dios cuyos ojos son semejantes
a los pétalos del loto
que sostiene a Lakshmi cuando ella danza;
aquellos que saben decir los siete mantras
al tiempo que contemplan tu belleza
oh Madre sonriente
Compañera de Shiva.

La diosa de la Palabra
habita para siempre en los labios
y el dios del Deseo en los ojos
de aquellos que cantan repitiendo tu nombre,
los siete mantras, uno tras otros,
o dos por dos, o tres por tres,
o todos a la vez, oh Kalila,
aquella cuyos pechos turgentes se adornan
de collares hechos de cabezas cortadas.

Sí, el menos inspirado
se transforma en un poeta,
cuando medita sobre tí, oh Madre,
y puede verte desnuda
a tí, con tus tres ojos,
igual que los tres mundos
creados con tu poder;
Tú, que estás adornada de un cinturón
hecho de brazos cortados;
Tú, que te acuestas sobre un cadáver
en medio de un cementerio
y haces el amor con Shiva.

Son venerados
siempre y en todo lugar
aquellos que meditan en ti
y te ven con los ojos del corazón,
oh esposa de Shiva,
habitante de los cementerios
entre el humo de las hogueras,
en medio de tantas osamentas,
cadáveres y cráneos
que se disputan los chacales,
Tú, jóven y hermosa,
gozando al lado de tu esposo.

De todos los poderes
llegará a ser maestro
y será para siempre vidente
aquel que, durante la noche,
desnudo y con sus cabellos en desorden,
pronuncie los siete mantras
y medite sobre tu nombre,
mientras está copulando con su yogini*,
una joven de pechos macizos
y bien contorneados muslos.

Así, conociéndolo todo
llegarán a él todas las alegrías
y tendrá en sus manos
todos los poderes del mundo
el vidente que repita
durante un año entero
los siete mantras, meditando
sobre ti, la Compañera de Shiva,
y comprendiendo finalmente
que durante vuestra unión
eres tú la que siempre tiene
la preeminencia sobre él.

Sin duda llegará a ser
el maestro de este mundo
aquel que estando en un cementerio
desnudo, con sus cabellos revueltos,
medite acerca de tu gloria
recitando los siete mantras
y ofrendándote granos y flores.

Del mismo modo, es bien seguro
que llegará a reinar sobre el mundo,
podrá convertirse en vidente,
aquel que sepa, oh diosa,
ofrendarte, en la noche de un martes,
al dar las doce y en un cementerio,
el vello que ha obtenido de su yogini
al tiempo que recita tus mantras.

Será el mejor
entre los músicos del Cielo
y reinará sobre el Océano de la Palabra Poética;
habitará en tu paraíso después de su muerte, oh diosa,
aquel que pronuncie sin cesar tus mantras,
meditando sobre el yoni de su compañera
y cubríéndolo de flores.

Su belleza será semejante
a la del dios del Deseo,
a tal punto llega el resplandor
de aquel que, a medianoche,
realice la unión con su yogini,
concentrando todo su pensamiento
en la sonrisa de tu rostro,
sentado sobre el mandala
como tú misma lo haces
sobre el cuerpo de Shiva
que yace, como un cadáver,
uniéndote así a él.

flor


Con el tiempo, te vas dando cuenta de que
para ser feliz con otra persona,
necesitas, en primer lugar,
no necesitar de ella.

Te das cuenta también que aquél alguien
que tu amas (o crees amar) y
que no quiere nada contigo,
definitivamente no es el "alguien" de tu vida.

Aprendes a quererte, a cuidarte y,
principalmente, a apreciar a quien también te aprecia.

El secreto es no correr atrás de las mariposas...
es cuidar del jardín para que ellas vengan hasta ti.

A fin de cuentas, tu vas a encontrar no a quien
estabas buscando, sino a quien estaba buscándote

MEMORIA


Ella se desnuda en el paraíso
de su memoria
ella desconoce el feroz destino
de sus visiones
ella tiene miedo de no saber nombrar
lo que no existe.

Alejandra Pizarnik

IXTAB



Girando y girando en un círculo creciente
El halcón no puede oír al halconero;
Todo se desmorona; no resiste el pilar;
La anarquía se adueña del mundo entero,
La marea sanguinolenta se ha desatado, y en todas partes
La ceremonia de la inocencia es ahogada;
Los mejores carecen de toda convicción, mientras que los peores Estan llenos de energía apasionada.

Seguramente alguna revelación está cerca;
Seguramente el Segundo Advenimiento está cerca.
El Segundo Advenimiento! Tan pronto han salido esas palabras de mi boca
Cuando ya una vasta imagen procedente del Spiritus Mundi
Turba mi vista: en algún lugar en las arenas del desierto
Una forma con cuerpo de león y cabeza humana,
De mirada vacía e implacable como el sol,
Mueve sus pausados muslos, mientras a su alrededor
Revolotean las sombras de las indignadas aves del desierto
La oscuridad cae de nuevo; pero ahora sé
Que veinte siglos de pétreo sueño
Fueron atormentados hasta la pesadilla por el mecer de una cuna,
¿Y que tosca bestia, su hora al fin llegada, Se arrastra hacia Belen para nacer?

W. B. Yeats, 1921

vendrá la muerte y tendrá tus ojos


Vendrá la muerte y tendrá tus ojos

Vendrá la muerte y tendrá tus ojos
esta muerte que nos acompaña
desde el alba a la noche, insomne,
sorda, como un viejo remordimiento
o un absurdo defecto. Tus ojos
serán una palabra inútil,
un grito callado, un silencio.
Así los ves cada mañana
cuando sola te inclinas
ante el espejo. Oh, cara esperanza,
aquel día sabremos, también,
que eres la vida y eres la nada.

Para todos tiene la muerte una mirada.
Vendrá la muerte y tendrá tus ojos.
Será como dejar un vicio,
como ver en el espejo
asomar un rostro muerto,
como escuchar un labio ya cerrado.
Mudos, descenderemos al abismo.



poema de Cesare Pavese (1908-1950)

verrá la morte


Verrà la morte e avrà i tuoi occhi

Verrà la morte e avrà i tuoi occhi-
questa morte che ci accompagna
dal mattino alla sera, insonne,
sorda, come un vecchio rimorso
o un vizio assurdo. I tuoi occhi
saranno una vana parola,
un grido taciuto, un silenzio.
Così li vedi ogni mattina
quando su te sola ti pieghi
nello specchio. O cara speranza,
quel giorno sapremo anche noi
che sei la vita e sei il nulla

Per tutti la morte ha uno sguardo.
Verrà la morte e avrà i tuoi occhi.
Sarà come smettere un vizio,
come vedere nello specchio
riemergere un viso morto,
come ascoltare un labbro chiuso.
Scenderemo nel gorgo muti.

miércoles, 30 de julio de 2008

Lluvia


PIEDRA NEGRA SOBRE UNA PIEDRA BLANCA

Me moriré en París con aguacero,
un día del cual tengo ya el recuerdo.
Me moriré en París -y no me corro-
tal vez un jueves, como es hoy, de otoño.

Jueves será, porque hoy, jueves, que proso
estos versos, los húmeros me he puesto
a la mala y, jamás como hoy, me he vuelto,
con todo mi camino, a verme solo.

César Vallejo ha muerto, le pegaban
todos sin que él les haga nada;
le daban duro con un palo y duro

también con una soga; son testigos
los días jueves y los huesos húmeros,
la soledad, la lluvia, los caminos..

César Vallejo

Una familia feliz


Leí por ahí, que la presidente Cristina, diosa total, ha ensalzado
las virtudes de la familia.
¡Como no hacerlo?
Las mejores familias argentinas están con ella....

Blues


saca esta espina
no puedo olvidar
arranca este dolor
no puedo olvidar
dale descanso a mi pena
no puedo olvidar
dia tras día
recuerdo, recuerdo
no puedo olvidar
arranca mi pena
no paro de llorar

al-des-almado


cuanto dolor encierras
tanta furia en el pasado
tanta vida
y el dolor que se junta en los huesos
y el amor que no rescata.
ni una hoja que cae del árbol más lejano respetas,
el universo es para vos
el grano de arena en tu ombligo.
todo lo que tocas se transforma en lodo
nada agradeces
despreciable lobo
de tus hermanos
si hubiera cerezos
y estuvieran en flor
tu mirada asesina
los volvería
silicio.